11 Jan
11Jan

UN CASTILLO CON HISTORIA...

Enclavado en el corazón de Sinaia, una de las zonas más interesantes de Rumania, se encuentra el fabuloso y cinematográfico Castillo Peles. El mismo se construyó por oden del Rey Carlos I de Rumania entre los años 1873 y 1914 para ser usado como residencia de verano para la familia real y, según cuenta la historia, la decisión habría sido tomada luego de que el rey llegara allí unos años antes y se enamorara del lugar, seguramente motivado por ofrecer una de las vistas más hermosas que se tienen de los Cárpatos y, además, por ser es un espacio que se encuentra totalmente rodeado de enormes bosques los cuales lo vuelven un sitio ideal para la tranquilidad y el descanso. 

Lo cierto es que la espectacularidad del edificio (cuenta con 160 habitaciones -muchas de ellas salones temáticos de enorme valor artístico- y 33 baños) sumado a que fue uno de los primeros en Rumania en tener luz eléctrica, calefacción y ascensor (toda una novedad a inicios del siglo XX) lo volvieron uno de los castillos más importantes de Europa y uno de los museos reales más importantes después de los que tiene la corona inglesa. Sin embargo, el castillo no sólo se utilizó como un espacio de recreación y descanso real sino que logró imponerse, también, como un verdadero centro de actividades culturales y políticas, albergando personajes de la talla de Francicsco José I de Austria-Hungría (a la cual pertenecía Rumania antes de la Promera Guerra Mundial) o la famosa actriz francesa Sarah Bernhardt, quien pasó allí una estadía invitada por la Reina Margarita, dado que era aficionada al mundo de las artes y de quien, se dice, publicó algunas novelas y cuentos bajo el seudónimo de  Carmen Sylva. Además allí, en 1914 y antes de que muriera el Rey Carlos I, se decidió la neutralidad de Rumania en la Primera Guerra Mundial. 

Luego, el lugar albergó a la Reina María de Sajonia-Coburgo y Gotha, quien se hizo muy popular entre los rumanos al establecer un vínculo más que estrecho con su pueblo a la vez que su imagen se engrandeció luego de haber sido voluntaria de la Cruz Roja en la Primera Guerra Mundial, sosteniendo a los soldados rumanos que peleaban el frente de batalla por la liberación de Rumania.  Finalmente, luego de haber pasado buena parte de su vida en el famoso Castillo Bran, la princesa murió en Peles en 1939 víctima de un cáncer de páncreas.  Algunos años más tarde, ya finalizada la Segunda Guerra Mundial y con el comunismo implantado en Rumania, el castillo fue expropiado a la familia real y transformado en museo a puertas cerradas, al cual sólo podían acceder los líderes del PCR- Partido Comunista Rumano. Cuentan que Nicolae Ceacescu lo visitaba asiduamente y que habría realizado allí algunas reuniones políticas o recibido a mandatarios de diferentes países en sus visitas oficiales. 

En 1993, luego de la caída del régimen comunista y finalizado el proceso de Guerra Fría en Europa, el castillo se transformó en museo y en parte de un grupo de complejos reales (junto al de Bran y Pelisor) que forman parte del enorme patrimonio histórico y cultural de Rumania. Desde entonces, anualmente lo visitan cerca de 300.000 visitantes al año y constituye, junto al Castillo Bran y algunos puntos históricos de Bucarest, uno de los sitios imperdibles para conocer y acercarse a la cultura rumano y su enorme y glorioso pasado.

Acompáñenme a descubrir el increíble Palacio Peles, una verdadera maravilla arquitectónica, escultórica, decorativa, mobiliaria e historica de la cultura rumana:

Vista exterior del Castillo en el cual se observa la arquitectura de estilo neogótico y neoclásico de finales del S. XIX. La estatua del Rey Carlos I, fundador y padre de la mayor dinastía real de Rumania observa cual faro protector hacia el bosque y los Cárpatos que emergen entre los pinares y abedules.

Apenas pone un pie en el interior del castillo, el visitante tiene una pequeña muestra de lo que verá a lo largo de toda la visita. Un enorme salón con columnas clásicas en diferentes mármoles de Carrara, tapices renacentistas y un mobiliario traído desde diferentes ciudades del mundo hacen de esa parte del castillo una veradera locación cinematográfica para una película de misterio o de fantasmas.  

Una enorme escalinata que exhibe el elaborado trabajo de carpintería y ebanistería que recubre la misma y las paredes lleva a la primera planta a través de la cual se accede a la Biblioteca y algunos de los enormes salones temáticos que conforman la estructura del castillo.

Los balcones de la biblioteca real llaman la atención por lo ecléctica y exhuberante de su arquitectura y de los elaborados diseños que las decoran. Elaboradas con las mejores maderas de los Cárpatos, los púlpitos y pequeños balcones dan la idea de magnificencia edilicia para albergar a los miembros de la familia real cada verano.

Coronando la biblioteca y el Gran Salón se encuentra el ampuloso Techo de cristal que es corredizo gracias a un moderno sistema eléctrico que permite levantarlo y ver el cielo. A principios de siglo XX dicha tecnología significaba un enorme avance y fue una de las razones por las cuales siempre se consideró a Peles como uno de los castillos más modernos de Europa del Este. 

El acceso a muchas de las salas ofrece pequeñas muestras escultóricas que le otorgan a los ambientes un estilo muy particular y una elegancia digna de una morada para la monarquía. 

Una enorme sala alberga buena cantidad de armaduras medievales (tanto de cabaleros como de caballos) y cerca de 4000 armas de diferentes tipos entre las que se encuentran espadas, floretes, rifles, arcabuces y todo tipo de armas utilizadas por cruzados y militares rumanos a lo largo de la historia.

                        Muchas de ellas están exhibidas como si fueran verdaderas obras de arte

Los vitrales son otras de las muestras de arte que abundan en los diferentes ambientes del castillo

A medida que se avanza de un  nivel a otro y se recorren ls diferentes pasillos que comunican uno sector con otro se pueden observar enormes alfombras, armaduras medievales, un buen número de objetos decorativos y una serie de cuadros que evocan a los diferentes personajes reales que pasaron por allí durante buena parte del siglo XX. 

LOS SALONES TEMÁTICOS QUE HICIERON FAMOSO AL CASTILLO

Si bien el castillo alberga en su interior cerca de 160 ambientes, no todos tiene  la misma extensión ni fueron pensados par cumplir las mismas funciones. Además de habitaciones , salas de estar, bibliotecas y hasta una sala que simula un pequeño teatro allí se encuentran una serie de salones temáticos especialmente diseñados para que los reyes y sus familiares tuvieran la sensación de estar en otras geografías sin la necesidad de abandonar el país (piensen que el palacio se inauguró casi en el inicio de la Primera Guerra Mundial y por ello, era muy dificultoso movilizarse dentro del continente debido a los cientos de frentes ubicados a lo largo y a o ancho de toda Europa) 

Sala de los conciertos: con capacidad para albergar a sesenta espectadores la sala está acondicionada como un pequeño espacio teatral y cuenta con un piano de cola y un escenario con telón italiano. A la vez de ser sala de conciertos también fue el espacio en el cual se llevaron a cabo obras de teatro y también de proyecciones cinematográficas privadas. 

El enorme salón comedor posee una mesa con sillas para 24 comensales (12 de cada lado) y se encuentra decorado por una serie de elementos en madera de enorme valor artístico. Sobre uno d elos laterales un enorme bayoux de estilo francés ornamenta el espacio a la vez que sirve de exhibidor de interesantes piezas de vidrio, cerámicas y porcelanas provenientes de Japón, China o la India.

Las habitaciones reales exhiben el ropaje de cama que usaron los reyes en su estancia a principios del siglo XX. Muchas de las recámaras estaban intercomunicadas por un sistema de pasadizos similares a los del Palacio de Versalles y servían para desplegar algunas de las infidelidades y secretos palaciegos que poseen la mayoría de las familias monárquicas.

La habitación del Rey Carlos y la Reina Isabel tenía un despacho y sala de recepción incorporado a la recámara. Se cree que muchas veces allí recibián a algunos familiares mientras trabajaban allí antes de comenzar la jornada.

El salón de los espejos es un espacio que otrora se usaba como antesala al salón de baile. Con vcerca de veinte espejos y caireles confeccionados con cistal coloreado de Bohemia, muchos de ellos asombran por el elborado trabajo artesanal, los colores y la enorme belleza que portan.

La Sala Turca: este era u espacio en el que el Rey recibía a sus amigos y donde, además de tomar café y fumar tabacos orientales, de vez en cuando desplegaban el arte del esgrima, razón que explica la amplitud que tiene el salón y la distancia que existe entre el centro tapizado por alfombras y las paredes que exhiben espadas, escudos, yelmos y otras reliquias medievales.

El despacho real funcionaba en un ambiente separado del resto de los ambientes y ofrecía privacidad al monarca mientras se encontraba trabajando allí. Curiosamente en una de las paredes de la habitación también se encuentra una puerta secreta que comunica con la salida del palacio y que se cree que funcionaba como una posible vía de escape ante un atentado o un incendio. 

El trabajo de ebanistería que revisten las escaleras y algunos decorados de las salas son sorprendentes

Sala morisca en la cual las mujeres amigas de la reina se reunian a charlar, escuchar música y fumar narguiles. El espacio abunda en alfombras orientales, sillones de terciopelo rojo y gobelinos de una enorme riqueza artesanal. Traídos directamente desde El Cairo les suponía a los reyes una buena forma de estar conectados con la historia universal y con el mundo oriental.

OBRAS DE ARTE PARA DECORAR UN CASTILLO SALIDO DE UN CUENTO

Además de enormes salones, vistas a los Cárpatos y jardines de ensueño, el castillo podría considerarse una verdadera pinacoteca o galería escultórica ya que porta una serie de obras de arte de los más reconocidos pintores europeos y otras piezas que bien podrían estar en las colecciones de los museos más importantes del mundo. 

Muchas de las obras exhibidas responden a encargos de los reyes para decorar los interiores del palacio. Desde retratos de miembros de la familia real a escenas bíblicas pasando por otras de la literatura y la mitología rumana, el castillo abunda en obras de arte volviéndolo un espacio ideal para los amantes de la pintura y del arte clásico.

Algunos cuadros poseen incrustaciones de cristales, espejos y hasta algunas joyas exóticas que se las incorporó para aumentar el valor de dichas obras.

Arcón de fines del siglo XIX elaborado bajo un gran trabajo artesanal de carpintería, ebanistería e incorporación de trozos de carey coloreados. 

Algunas de las esculturas fueron pensadas para decorar y otras con cierta funcionalidad. Aquí este grupo de ninfas marinas sostienen uno de los estantes de la biblioteca ubicada en el despacho del rey. 

LOS JARDINES: BOSQUES, VISTA A LOS CÁRPATOS Y LA FACHADA DEL CASTILLO

                  Vista de los Cárpatos en un día nublado, típico de los inviernos transilvanos 

La escultura del Rey Carlos I mirando hacia la ladera de los Cárpatos y los dos personajes el mundo clásico conviven a la perfección en los jardines del palacio.

Escultura que evoca la fuerte presencia de la Reina Maria, considerada la "Madre de Rumania" y monarca más querida en toda la historia del país. 

Un grupo escultórico conformado por nereidas, seres mitológicos y personajes reales acompañan a la clásica fuente que ya es todo un emblema del Castillo.

El elaborado trabajo arquitectónico de tipo multiestilístico deja al descubierto en la fachada algunas muestras de neoclasicismo, neogótico y elementos de las culturas bávara y moldava. 

               Un puente de piedra comunica el castillo con los diferentes jardines y el bosque 

Restos de columnas medievales fueron reconfiguradas como macetas o decoración. Ubicadas en los jardines del castillo, en ellas se pueden observar símbolos y elementos típicos del mundo medieval de la antigua Valaquia.

Sitio Web Castillo Peles

Castelul Peles

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.